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Comienza la construcción del primer carguero a vela de NEOLINE
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El plan de NEOLINE, con sede en Francia, de construir un moderno carguero de vela se está haciendo realidad con el inicio de la construcción del primer buque en el astillero RMK Marine de Turquía.
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El buque de 136 metros de eslora, que se llamará Neoliner, contará con dos mástiles plegables de fibra de carbono "Solidsail Rig System" y 3.000 metros cuadrados de superficie vélica. Su entrega está prevista para 2025.
Neoline se fundó en 2015 con la intención de convertirse en el primer armador del mundo especializado en modernos buques de carga rodada que utilizan la energía eólica y las velas como principal forma de propulsión. La empresa tiene previsto desarrollar dos buques para operar entre Saint-Nazaire (Francia) y Saint-Pierre-et-Miquelon (Terranova), Baltimore (Maryland) y Halifax (Nueva Escocia). Entre sus primeros clientes figuran el Grupo Renault, el Grupo Beneteau, el Grupo Manitou, Michelin, Jas Hennessy & Co, Clarins, Longchamp o Rémy Cointreau.
NEOLINE Armateur se lanzó en 2021 como empresa armadora que explotará los buques.
La construcción del primer buque en RMK Marine llega después de que esfuerzos anteriores no llegaran a materializarse. NEOLINE ya había firmado una carta de intenciones para el primer buque con el constructor naval Neopolia Mobility, con sede en Loira (Francia).
El sistema de aparejo Solidsail ha sido diseñado y fabricado por el astillero francés Chantiers De l'Atlantique. Los dos mástiles de fibra de carbono tendrán 76 metros de altura cada uno y 3.000 m2 de velas rígidas, una versión más pequeña pero más eficaz de los 4.200 m2 previstos inicialmente.
Neoliner tendrá una capacidad de carga de 6300 toneladas, equivalente a 321 automóviles, 265 contenedores de 20′ o 125 contenedores de 40′.
La construcción del primer buque llega después de que NEOLINE alcanzara su objetivo de financiación de recaudar 60 millones de euros de socios públicos y privados. El gigante naviero francés CMA CGM figura entre los inversores.
"El Grupo CMA CGM, cuyo objetivo es alcanzar el Carbono Neto Cero en 2050, ha estado plenamente involucrado durante muchos años en el desarrollo de proyectos y prototipos para acelerar la descarbonización del sector marítimo. Dada la importancia de los retos, estamos convencidos de la necesidad de explorar todas las opciones", declaró Emilie Espanet, Directora del Fondo de Energías de CMA CGM. "Tendrán que coexistir varias tecnologías para construir las soluciones de propulsión descarbonizadas del mañana.
"Por eso el Grupo CMA CGM, gracias a su Fondo para las Energías de 1.500 millones de euros, ha querido convertirse en socio de NEOLINE, cuyo proyecto de transporte a vela RORO nos parece extremadamente prometedor"
D-ICE Engineering suministrará los sistemas avanzados de encaminamiento, navegación, pilotaje y supervisión del sistema de propulsión eólica.
"Juntos, hemos conseguido llevar a cabo un proyecto que, en muchos aspectos, podría parecer utópico en un principio. Pero, en un contexto que nos recuerda a diario que la lucha contra el cambio climático es el reto de este siglo, la propulsión eólica para buques comerciales se está convirtiendo cada vez más en una solución pragmática a una cuestión energética cada vez más compleja", ha declarado Jean Zanuttini, Director General de Neoline Armateurs. "El viento es ciertamente intermitente, pero es más predecible que los precios y la disponibilidad de muchas otras energías. Es una oportunidad sin precedentes para aportar nuestro granito de arena a la transición energética y retomar el hilo de la historia del transporte marítimo a vela."
